Jesús Adrián Romero ha publicado en su página de Facebook una respuesta a publicaciones sobre declaraciones que hizo con relación a la celebración de Halloween, donde dijo que está bien que los cristianos celebren Halloween. Jesús Adrián Romero defiende su postura diciendo que muchas de las cosas que hacemos tienen origen pagano y que «El hecho de que algo sea pagano no quiere decir que sea malo».
«Debo empezar diciendo que ese mensaje fue dirigido a nuestra congregación en Monterrey, y no para el público en general. Es decir: el mensaje era dirigido a un contexto específico, a una cultura específica y a una iglesia con una jornada espiritual específica», dijo Jesús Adrián Romero en su página de Facebook. «Es por eso que el video no era dirigido a todos, pero ya que el tema salió a la luz, explicaré mi posición». Continuó.
«Conozco la historia y el origen pagano de la celebración de Halloween. No soy ningún neófito en temas como éste, o en temas espirituales o de la Biblia.»
«Pero, ¿Qué significa que algo tiene origen pagano? Significa que surgió de una cultura o de personas que no creían en Dios de la manera en la que nosotros la hacemos. No debemos satanizar la palabra pagano; el hecho de que algo sea pagano no quiere decir que sea malo. Muchas de las cosas que hacemos tienen origen pagano. «
JAR vuelve al tema de Halloween diciendo que Halloween comenzó hace unos 2000 años en el norte de europa como un ritual de superstición e ignorancia y que las fuentes antiguas que hablan sobre el tema son escasas y no se conoce la naturaleza exacta de la festividad.
También dijo «Se han encontrado escritos que hacen alusión a una celebración de la cosecha en la que supuestamente el mundo espiritual se abría y se podía tener comunión con los muertos, pero mucho de esto es especulativo por los escasos documentos que existen.»
Continuó explicando que el trabajo de la iglesia es «sacar a la gente de su pecado y su esclavitud a la superstición y llevarlos a la luz, por eso cuando el cristianismo llegó al Norte de Europa se le puso el nombre de halloween a la celebración y significa el día de todos los santos».
Dice que no hay ninguna conexión de la festividad actual con la antigua, excepto por la fecha y que actualmente es una fiesta familiar sana, donde la gente sale disfrazada a pedir dulces. También dijo:
«Creo que los que piensan en Satanás y demonios en la noche de halloween son los cristianos, los no cristianos “ni en cuenta”.
Por supuesto que hay algunos raros que se declaran satanistas y brujos y aseguran que es la noche de Satanás, pero son una minoría.
Me atrevo a decir que el 99% de la gente que celebra halloween no tiene nada que ver con unos cuantos raros que ven esta noche como la noche del diablo.
Ningún padre de familia se reúne con sus hijos a hablar con sus hijos antes de pedir dulces y les dice: “Bien hijos, esta es la noche de Satanás y su demonios, ¡vamos a celebrarlo!
En Latinoamérica sigue reinando la superstición y nos encanta encontrar al diablo en todo. En vez de avanzar estamos retrocediendo y nos estamos convirtiendo en cómo era la gente hace cientos de años.
Según nosotros estamos peleando una guerra espiritual.
La verdadera guerra espiritual tiene que ver con luchar en contra de conceptos equivocados que la gente tiene acerca de Dios, no en pelearte con la gente porque sale a pedir dulces.«
Y terminó su largo comunicado diciendo:
«La guerra espiritual tiene que ver con combatir argumentos y altivez en contra del conocimiento de Cristo.
Compartamos el amor de Dios, el evangelio de la verdad; esa es la verdadera guerra espiritual.
Mi consejo a mi congregación es: No seas como los cristianos que el día de halloween cierran sus puertas y se vuelven irrelevantes. Tenemos una excelente oportunidad para sonreír, saludar, y relacionarnos con nuestros vecinos.
Sé que hay líderes e iglesias que piensan muy parecido a mí, pero como no son tan públicos, no son tan criticados como yo. También estoy consciente que hay líderes que piensan distinto a mí, pero nuestras diferencias son en temas periféricos.
Al decir temas periféricos me refiero a que no son temas esenciales de la fe.
Hay una tendencia en Latinoamérica de catalogar de herejes a aquellos que piensan distinto en temas periféricos, pero esto no es correcto. La herejía y la apostasía en su sentido estricto se atribuye a enseñanzas que van en contra de temas centrales de la Biblia, tal como la divinidad de Jesús, la resurrección, la salvación por fe, la trinidad, entre otros temas.
Amo a Dios y amo a la gente.
Mi deseo es que la gente conozca a Jesús, y si al hacerlo me encuentro con que muchos cristianos me van a rechazar, estoy dispuesto a pagar ese precio.
Con amor
Jesús Adrián Romero»