Dios es nuestro mayor tesoro, por eso debemos cantarle e invocar su santo nombre, Él es nuestro Creador, nuestro sustento, a Dios sea la honra, la gloria y el poder para siempre.
A veces nos hacemos los ignorantes sabiendo que nuestro Dios es el Creador y no le adoramos ni bendecimos su nombre. Debemos ser más que agradecidos por ese privilegio que Él nos ha dado a cada uno de nosotros, rendirnos delante de Él y dar voces de jubilo a nuestro Dios grande y fuerte.
Todos los libros de la Santa Palabra de Dios nos hablan acerca de lo maravilloso que es Él, no habla de que debemos rendirnos delante de Dios con regocijo, cantarle y exaltar su nombre. Es por eso que debemos hacer todo bueno para nuestro Dios en honor a Él.
3 Porque mejor es tu misericordia que la vida;
Mis labios te alabarán.
4 Así te bendeciré en mi vida;
En tu nombre alzaré mis manos.
Salmos 63:3-4
Por eso Señor con mis manos y mi vida Te alabaré, invocaré Tu santo nombre para siempre, mis labios pronunciarán Tus obras día tras día, a Ti daré toda mis fuerzas Señor, con mis manos y mi vida cantaré solo a Ti Señor Jesús.
En este salmo podemos ver al salmista David cuando estaba en el desierto de Judá, él estaba adorando a Dios, a David no le importaba donde se encontraba ni la dificultad por la que se encontraba, él solo miraba a su salvador, a Aquel que hace buenas todas las cosas.
Un Dios que se compadece de todo el mundo, un Dios que con grande misericordia nos cubre día tras día, que con sus alas nos cubre y nos da nuevas fuerzas. A Él debemos alabarle y cantar salmos a su nombre por todos los siglos.
Porque si no fuera por su gracia y su gran amor, pues entonces no estuviéramos aquí, así que invoquemos su nombre en todas las alturas, no nos cansemos de cantar para su gloria, que unidos siempre podamos decir que Él es el creador de grandes cosas y que todo lo que fue creado por Él has sido bueno.
No nos olvidemos de cantarle nuevos cánticos a Dios, seamos sabios y postrémonos ante su gran presencia con regocijo y con amor. Dios se merece todo lo mejor de su creación, que toda rodilla se doble ante Él, y dé voces en nombre de Dios grande y poderoso.
